El largo trayecto del arroyo Tanti refresca los días estivales de la ciudad del mismo nombre y la engalana con paisajes maravillosos que invitan al disfrute sereno de las piletas naturales formadas a su paso. Así, mientras cada curva del serpenteante curso impulsa a descubrir un poco más entrando en conexión con el terreno, otros arroyos completan la propuesta ampliando las posibilidades de acceso a playas y balnearios.
Ubicado a la altura de la Cueva de los Helechos se encuentra el Pozo del Indio, una gran hoya de siete metros de profundidad que se constituye en el punto de inicio para una aventura inolvidable. Disfrutar de un baño acompañado por peces y relajado por hidromasajes naturales son algunas de las actividades que en esa instancia del arroyo pueden hacerse.
Inserta en una imagen de naturaleza incomparable, La Cascada es un atractivo que invita a disfrutar de sus aguas puras y cristalinas. Un salto de 20 metros de altura rodeado por paredes de granito y una abundante vegetación conforman un sitio excepcional que recibe una visita multitudinaria cada año. A poca distancia, el atractivo se completa con una profunda canaleta que invita a nadar junto a las tranquilas especies acuáticas del lugar.
El Diquecito es un balneario municipal construido a orillas del Arroyo Tanti. Una estructura moderna de aguas cristalinas ofrece una pileta cuyas profundidades varían entre los 30 centímetros y los 6 metros. Además, brinda a los turistas todos los servicios indispensables para pasar un buen momento.
Río abajo de El Diquesito, y tras sortear enormes piedras donde el agua dibuja saltos fotográficos, se alcanza lo que fuera la entrada al Castillo de Wilkins. Se descubre allí, entre una abundante arboleda, el balneario La Ollita.
En la confluencia de los arroyos Tanti y Los Sauces se encuentra una isla natural que ofrece a los amantes de la naturaleza un complejo turístico provisto de comodidades y servicios para una estadía muy agradable. La Isla propone esparcimiento, relax y naturaleza. Tras el balneario, se suceden piletas aptas para todos los gustos. Un lugar perfecto que se recomienda conocer.
Tranquilidad y un paisaje con vistas panorámicas originales dan vida al balneario Los Sauces. Rodeada por un gran cordón de árboles está la pileta cuyas aguas se tiñen del color intenso de dicha vegetación. El arroyo Tanti se desliza por un tobogán de piedra para alimentar con su caudal de agua el balneario. Un buen descanso se hace posible gracias a que cuenta con todos los servicios y comodidades.
Un pozo natural acompañado por una pileta para los más chicos compone el último balneario con características originarias. Extendido junto a un vado, el balneario La Olla es el punto a partir del cual comienza una sucesión de complejos estructurados por la mano del hombre: Sans Souci, Los Árboles, Villa Dumas, entre otros.