Uno de los sitios atrapantes para los visitantes que lleguen hasta Molinari será el multifacético Parque Fitozoológico Tatú Carreta. Extendiéndose a través de 60 hectáreas, invita a maravillarse con la flora y fauna autóctona, y también con otras especies exóticas que transitan estos paisajes serranos. Una de sus características más sobresalientes es que los animales se encuentran en libertad, y se los puede admirar a través de recorridos con vehículos especiales; caminatas por senderos especialmente preparados para ello; y excursiones con guías. Los tesoros para descubrir son infinitos, pero los que más llaman la atención son el ambiente de nidificación de los cóndores; las lagunas, con carpinchos y muchas aves; y la estación de recría del jaguareté. Dentro de los representantes de la fauna foránea se destacan guanacos, maras, ñandúes, carpinchos, cisnes coscorobas, grullas y monos acostumbrados, a la presencia del hombre en su hábitat. Además de posibilitar el encuentro con la naturaleza, dentro del predio se puede disfrutar de una piscina; fogones; parrillas; quinchos; kiosco; bar; cancha de vóley y futbol. Imperdible conocerlo a través de un pintoresco paseo en trencito.