Como en la mayoría de las historias de los pueblos argentinos, el origen de Oliva está vinculado al tendido de las vías férreas. El Ferrocarril Central Argentino atravesó estas tierras durante el desarrollo de su tramo Rosario-Córdoba, y a partir de allí los habitantes comenzaron a poblar la zona circundante. La Estación del Ferrocarril es uno de los testimonios que permanece en pie desde aquellas épocas. Fue inaugurada el 10 de noviembre de 1890.