Estancia San Isidro, como se la conocía antiguamente, no posee fecha de fundación, tampoco reconoce a una personalidad fundadora. Fue aldea de la mano de los conquistadores y, previamente, fue tierra de naturales de origen Sacate o Sanavirona y también Comechingones o Camiares.
Los visitantes que se acerquen a este destino serrano podrán engalanar sus miradas con los vestigios de la vida aborigen, que aún se dejan admirar en Río Ceballos, Sierras Chicas, Córdoba.