Entre las localidades de Deán Funes y San José de la Dormida, al norte de la provincia de Córdoba, se encuentra Villa Tulumba. Una ciudad ambientada con elementos característicos de principios del siglo XX, lo que genera la sensación de estar vivenciando aquellos tiempos. El paisaje privilegiado de todo poblado cordobés invita a contemplar la naturaleza y a disfrutar de la tranquilidad del ambiente alejado de las grandes urbes.
Las calles empedradas, las farolas antiguas y las añejas construcciones nos conducen por los caminos de la historia y las diferentes huellas que ésta ha dejado en el lugar. La Iglesia Nuestra Señora del Rosario y el tradicional rezo del Ángelus dan cuenta de una de las herencias que caracterizan a los creyentes pobladores de Villa Tulumba.
La amabilidad de su gente y los relatos del pasado nos invitan a recorrer los diferentes recodos de la ciudad, entre ellos: las ruinas de la Antigua Capilla, el Museo Runa Huasi y la Casa de los Reynafé. Espacios donde las reminiscencias del pasado adquieren un importante valor que hacen a la cultura de la Villa.
Las panorámicas típicas de las localidades que se asientan a los pies de los cordones serranos se combinan con los vestigios de la historia siempre presente en las costumbres de los habitantes del lugar. La serenidad y armonía de la naturaleza hacen de Villa Tulumba un destino cálido y atractivo para quienes buscan descansar.