Ubicada en una estancia de orígenes jesuítico, la Iglesia de la Candelaria se suma al itinerario que invita a descubrir los testimonios religiosos que sobreviven al paso del tiempo. Este templo de anchos muros, líneas simples, y construido con materiales disponibles en la zona, data de 1683 y fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000.